Este cuadro replantea el juego espacial doble donde es el personaje quien introduce al espectador en el paisaje, viendo el espectador ambos; en este caso vemos la habitación y la muchacha nos introduce en el paisaje que ella contempla de espaldas al espectador.
Dalí crea un paralelismo entre el ser humano y la arquitectura, donde se plasma un concepto ensimismado, casi onírico de la realidad, por la contundencia de formas a través del dibujo y la luz que imprimen al cuarto y al paisaje. Dalí hace un trabajo muy cuidado en la representación de la cabellera de su hermana Ana María, cabello tratado casi con el cuidado de una miniatura. La figura de espaldas simboliza para Dalí una idea profética.

La cortina cerrada indica el encierro en que se encuentra sometida. Finalmente, en esta representación se le resta importancia a la figura de la mujer y a su cabellera.
Buena argumentación, que es lo más importante.
ResponderEliminar